Flores

Un viaje al corazón de la civilización maya

Imagina despertar rodeado de un lago tranquilo, con calles empedradas, casas de colores y un ambiente relajado. Así es Flores, la encantadora isla-ciudad en medio del lago Petén Itzá. Desde aquí, no solo te desconectas del mundo moderno, sino que también estás a las puertas de uno de los patrimonios arqueológicos más fascinantes de América: las ruinas mayas de Tikal, Yaxhá y Topoxte.

Tikal es monumental. Caminar entre sus templos, plazas y calzadas es como retroceder más de mil años. El Templo del Gran Jaguar, la Plaza Central y los templos que emergen sobre la selva te regalan una experiencia mística. Y cuando subes a uno de ellos y ves el amanecer o el atardecer sobre el dosel verde, no hay palabras que lo describan: solo hay que vivirlo.

Pero eso es solo el inicio. Yaxhá, más escondido y menos concurrido, ofrece una experiencia más íntima. Rodeado por lagunas, monos aulladores y caminos selváticos, este sitio arqueológico conserva la magia pura del mundo maya. Desde su acrópolis, la vista es espectacular, especialmente al caer la tarde. Y si buscas aún más conexión con la naturaleza y la historia, Topoxte te espera como un secreto bien guardado. Esta pequeña isla en la laguna Yaxhá alberga vestigios que parecen susurrar las historias de sus antiguos habitantes. Se accede en lancha, haciendo que la travesía sea parte del encanto.

Entre caminatas, historia viva y paisajes de ensueño, este viaje por el Petén guatemalteco es un puente entre el pasado y el presente. Un encuentro con una cultura ancestral que aún palpita bajo la tierra y entre los árboles.

Descúbrelo con Avitours, porque la historia también se viaja.
Y esta, es de las que nunca se olvidan.